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Robo, fraude y venta en agencia: el caso de la Jeep Grand Cherokee que pone en jaque a Puebla y Edomex
Una Jeep Grand Cherokee, robada en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, el pasado 10 de diciembre de 2024, fue localizada semanas después en una agencia de autos de Puebla. Sin embargo, el caso ha generado controversias legales y públicas, debido a inconsistencias en las denuncias y los documentos del vehículo.
Los hechos:
Según Aldo N, presunta víctima del robo, el vehículo le fue arrebatado por sujetos armados el 10 de diciembre cerca de las 17:00 horas. Asegura que los delincuentes le rompieron un vidrio y lanzaron amenazas durante el asalto. Sin embargo, su denuncia ante la Fiscalía del Estado de México se interpuso hasta el 19 de diciembre.
El caso ganó notoriedad en redes sociales cuando Aldo publicó que había encontrado la camioneta en la agencia “Autos El Ángel de Puebla y comercializadora de Autos Parra”, ubicada en la colonia El Carmen, Puebla.
La posición de la agencia de autos:
Jesús Avendaño Rodríguez, abogado de la agencia, explicó que la camioneta fue adquirida legalmente el 14 de noviembre de 2024 a través de un proveedor de confianza, Gerardo N, quien llevaba siete años colaborando con la empresa. La agencia realizó un contrato de compraventa, pagó por la unidad y aguardaba la entrega de la factura. Sin embargo, Gerardo desapareció, dejando pendiente la documentación.
En diciembre, un hombre identificado como Rafael llegó a la agencia, acompañado de Aldo, exigiendo la entrega de la camioneta. Rafael afirmó haber vendido la unidad a Gerardo, quien no le pagó, y localizó el vehículo mediante GPS. Sin embargo, la agencia se negó a entregarla, argumentando la existencia de un contrato de compraventa válido.
Inconsistencias y denuncias cruzadas:
El 18 de diciembre, la agencia interpuso una denuncia por fraude contra Gerardo N. Posteriormente, el 6 de enero de 2025, la Jeep Grand Cherokee fue registrada como robada en el Registro Público Vehicular (REPUVE). Este dato resulta clave, ya que, al momento de la compra por parte de la agencia, no existía ningún reporte de robo.
El abogado de la agencia cuestionó las declaraciones de Aldo N, señalando inconsistencias en sus tiempos de denuncia y en los daños reportados al vehículo. Afirmó que la camioneta nunca fue manipulada ni circulada desde su adquisición, respaldando su declaración con fotografías.
Pruebas periciales y expectativas legales:
Las autoridades están realizando peritajes para esclarecer los hechos, incluyendo la revisión de la serie de origen del vehículo y los supuestos daños al vidrio. También se investiga a una mujer identificada como la primera dueña de la camioneta, quien aparece en la factura original.
“Queremos dejar claro que una cosa es el fraude que sufrimos por parte de Gerardo, y otra muy distinta es que la agencia tuviera conocimiento de que el vehículo estaba involucrado en un delito, pues cuando se adquirió, no había irregularidades legales”, concluyó Avendaño.
